
Una hamburguesa por la noche siempre es una buena opción de cena para los peruanos. A las tradicionales carretillas de la esquina, en los últimos años se han sumado las llamativas combis sangucheras.
Esta forma de negocio tiene como gran ventaja la movilidad de los vehículos, lo que permite que el centro de venta se pueda ir trasladando hasta encontrar un lugar o esquina con óptima concurrencia o buena afluencia de público.
Los vehículos pueden albergar en su interior de 2 a 3 personas para la venta. La capacidad de producción será mucho mayor que en una carretilla simple, y también se tendrán mejores condiciones sanitarias que generen mayor confianza en el público.
Por último, entre los productos más solicitados por los comensales se encuentran la hamburguesa clásica, la royal (con huevo y queso), el filete de pollo y las salchipapas.